Con participantes del sector del libro de todo Chile, la Cámara Chilena del Libro, a través de Prolibro, inauguró este lunes el Taller de Gestión y Desarrollo de Herramientas de E-Commerce para empresas del libro. Este pionero proyecto cuenta con el patrocinio del Grupo Iberoamericano de Editores.
Con la participación, desde México, de José Ignacio Echeverría, editor y directivo de vasta trayectoria en la Universidad Autónoma de México UNAM y en diversas empresas editoriales, actual Presidente del Grupo Iberoamericano de Editores, y de la editora y abogada argentina Ana María Cabanellas –empresaria del Grupo editorial Claridad, expresidenta de la Unión Internacional de Editores (IPA) y de diversos organismos internacionales de la industria–, La Cámara Chilena del Libro, a través de Prolibro, inauguró y dio inicio esta semana al Taller de Gestión y Desarrollo de Herramientas de e-Commerce para Empresas del Libro.
Junto con agradecer el financiamiento del Fondo Nacional de Fomento del Libro y la Lectura, convocatoria 2021 del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, y el respaldo del Grupo Iberoamericano de Editores, en la apertura, el presidente de la Cámara Chilena del Libro, en representación del directorio, saludó y dio la bienvenida a los participantes. “Tenemos personas inscritas desde Arica hasta Punta Arenas y también desde Rapa Nui. Nos sentimos muy contentos por el entusiasmo que ha generado esta capacitación certificada, que estamos realizando como un proyecto pionero, que busca apoyar la incorporación de herramientas tecnológicas en la cadena del libro ante las oportunidades y desafíos que representa el comercio electrónico”.
Por su parte, el presidente del Grupo Iberoamericano de Editores, José Ignacio Echeverría, dio una visión y perspectiva general del libro y su industria en este difícil momento. Asimismo, felicitó y agradeció a la Cámara Chilena del Libro, “por el esfuerzo notable que está haciendo para ayudar a los editores, distribuidores y libreros a enfrentar y superar estos tiempos que, lamentablemente, añadido el Covid-19, han hecho mucho daño a nuestro sector. El editor –entendido como la casa editorial– va a tener que cambiar su punto de vista. Ya no es nada más producir libros como lo conocíamos hasta hace algunos años”, agregó.
El taller certificado –impartido de manera gratuita por Prolibro a través de la plataforma digital Zoom– durará un mes y está dirigido a librerías, editoriales, distribuidoras y organizaciones de venta directa de todo Chile, contemplando un total de 8 módulos, en los que se tratarán temáticas como fundamentos del comercio electrónico, tipos y modelos de negocio, comercialización, comunicación, gestión de tiendas online, marketing digital y gestión logística, entre otras.
Durante la primera jornada, correspondió la participación de la editora Ana María Cabanellas, conectada desde Estados Unidos, quien dio la conferencia inicial agendada en el programa del Taller. En ella, junto con analizar la situación actual de la industria en todo el mundo, entregó cifras del crecimiento y datos de la evolución de los distintos formatos y soportes, como libros impresos, digitales, audiolibros y otros.
“Decenas de industrias han tenido que replantear su quehacer, reestructurarse desde los cimientos o incluso cerrar las puertas. La industria editorial no es la excepción. Además, el sector está sufriendo cambios que producen la idea de comenzar otra era”, explicó.
Asimismo, profundizó en la visión y perspectiva de cara al futuro próximo para el sector editorial, considerando el actual contexto, no solo respecto a la pandemia, sino también a la rapidez con que van cambiando los sistemas de comercialización. “Lo mejor de las empresas está en las personas que les dan vida y es imprescindible, necesario e incuestionable ofrecerles la ampliación de sus conocimientos y habilidades para adaptarlas a las nuevas necesidades del negocio. Es de suma importancia reflexionar desde cada arista, desde los comercios grandes y pequeños, renovar las estrategias”, dijo, enfatizando en la idea de que siempre “servir al lector debe ser el objetivo de toda la industria editorial”.
(Cortesía)